Hamad A ECM
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Descripción de la experiencia:

La primera fue en una cirugía en 1986 durante la guerra entre Irak e Irán, cuando me encontraba bajo anestesia. Después de la operación militar de Valfajr, cuando Irak reclamó la ciudad de Paveh de Irán, hubo otra pequeña operación militar en el lado oeste. Una bala me golpeó la cabeza y caí en coma. Fui dado por muerto porque mi pulso era extremadamente débil y no podían detectarlo. Luego envolvieron mi cuerpo en una bolsa plástica y me trasladaron con los otros cadáveres a un depósito de cadáveres. Notaron que el vapor se acumulaba dentro de la bolsa de plástico en la que estaba mi cuerpo y se dieron cuenta de que estaba vivo. Tenía la sensación de que me llevaban a lo largo de un camino en un carril, rodillo o algo así.

Estuve en coma por cerca de un mes. Luego de que desperté, no podía recordar quién era o cuál era mi nombre y dirección y tampoco tenía mi placa militar. El único recuerdo que tengo de mi coma es que estaba caminando por un sendero y podía oír a la gente hablando, eso es todo. Cuando desperté de mi coma había perdido mi memoria. Incluso no podía leer.

La segunda vez fue en el hospital de Loghman-Hakim en Teherán donde tuve algunas operaciones. Durante la cirugía, aunque estaba anestesiado, podía escuchar a los doctores y a las enfermeras hablando. Incluso podía ver qué color de vestido llevaban. Podía oír las bromas que estaban diciendo. Estaba observando todo desde el techo.

Otro momento fue en 1990 0 91. Estaba en muy mal estado de salud debido a mis heridas en la guerra y tuve una convulsión. Mi madre me contó más tarde que tuve un paro cardíaco y ella había estado llorado y orado mucho y creo que eso fue lo que me trajo de vuelta.

No hubo miedo, ni pesadillas en ninguna de estas experiencias; por el contrario, había una especial sensación de paz y calidez. Podía sentir la diferencia entre el mundo físico y el espiritual. Podía sentir que las leyes físicas como la gravedad o el dolor no aplicaban en este mundo espiritual. Puedes ver claramente en la oscuridad de la noche y puedes ver directo al sol sin quemarte los ojos. Podía sentir que era protegido por una fuerza invisible. No sentí soledad o pérdida en absoluto, es difícil de explicar. Era como si hubiera ojos mirándome, pero no podía verlos. Aunque uno espera sentirse angustiado, el sentimiento dominante era el amor, pero extrañaba a mis seres queridos. El espacio en el que me encontraba era luz con un color especial entre verde y amarillo. Sentía como si estuviera en un tipo de borde o frontera, donde un lado tenía un color y el otro lado un color diferente. Podía ir a un lado y volver. Podía ver la luz y los colores, pero no podía ver la fuente de estos.

¿Cómo le afectó esta experiencia?

Es un sentimiento muy placentero justo en el límite entre el mundo físico y el metafísico. Me encuentro esperando repetir esa sensación y es como si siempre hubiera estado esperándolo. Soy más espiritual, incluso sin haber tenido una experiencia al borde de la muerte, tenemos la capacidad para tener una experiencia espiritual en esta misma tierra. Esto puede suceder con la práctica del desapego de las cosas terrenales como el dinero, la victoria y la derrota. De esa manera estas experiencias no me afectan y no me hacen feliz o triste. Esta experiencia me dio una sensación de que hay algo más allá de ese límite. Cuando me alejé de esa atmósfera verde, fue muy desagradable ensuciarme de nuevo y volver al mundo físico. Ahora puedo tomar decisiones más fácilmente y percibir las cosas justo como realmente son - un juego de niños. Hay una cita del Imán Jomeini de que todas estas peleas que tenemos se deben a nuestros egos. Tengo la sensación de que las cosas en este lado son irrelevantes. Pero esa sensación de luz, amor y justicia, se convierte en un sentimiento permanente. Si guardamos esto en el corazón, nos mantendrá en un buen lugar y evitará que volvamos a las viejas costumbres. Cuando peco, me repugna enseguida.

En mi experiencia, cuando estaba en el hospital, había una enfermera cuyo vestido no era apropiado y estaba descubierta. Pero durante mi experiencia, vi que ella estaba brillando con luz. Me preguntaba quién era ella. Pero luego la vi alimentándome personalmente poniendo comida en mi boca. Ella estaba muy preocupada por un soldado herido que estaba débil, discapacitado y solitario y no tenía a nadie más allí. Lo estaba haciendo con tanta compasión. Entonces ves que algo está pasando. Lo que ellos (profetas y líderes espirituales) dicen no es sólo cuentos de hadas. Este punto de vista me ayuda a no hundirme en este mundo físico. Por supuesto, si no niego el aspecto espiritual de la experiencia. En su experiencia, ¿vio alguna entidad espiritual o maligna o alma de algún fallecido?

No me sentía solo allí. Es como si hubiera ojos mirándome. Nosotros interpretamos las cosas de acuerdo con las enseñanzas de nuestra propia religión. Podemos llamarlos ángeles o algo así, pero esa es nuestra interpretación. Sé que hay algo pero no sabes como es y no puedes dibujarlo.

¿Vio algo del futuro?

Vi una imagen mía cuando estaba muy anciano y parecía empapado, como Ammar en la serie de televisión Imam Ali.