Descripción de la experiencia:

Estaba sentada en la mesa de desayuno hablando con mi madre. Empecé a sentirme mal. El momento empeoro. Creí que me iba a desmayar. Me desmaye pero mis ojos continuaban abiertos. Podía ver y oír, pero no me podía mover. Me sentí realmente mal. Entonces, perdí totalmente la consciencia. Mis padres llamaros al médico ya que habían transcurrido alrededor de 20 minutos y todavía permanecía inconsciente. Justo antes de que el doctor llegase, recupere mi estado normal.

Viaje a un lugar extraño el cual era de terciopelo marrón suave. Emocionalmente me sentí bien. A mi izquierda apareció un hombre que acababa de salir de una habitación llena de personas. Supe que aquellas personas habían fallecido. No se cómo, pero simplemente lo supe. Una de aquellas personas era mi padre, quien todavía estaba vivo por aquel entonces. Sabía que mi padre estaba en aquella habitación, pese a que no podía ver con claridad en su interior. Todas aquellas personas estaban intercambiando ideas en unas conversaciones muy interesantes.

Le dije al hombre que había aparecido que me estaba sintiendo verdaderamente mal, y le pregunte qué es lo que podía hacer. Me dijo que fuese con él para reunirme con los demás. Le conteste que tenía muchas cosas por hacer, que me esperaban mis hijos y mi marido quienes necesitaban de mi y a quienes todavía tenía hacer cosas por ellos. Él lo entendió, y me dijo que en ese caso debía de centrarme en mi situación y mirar por ellos. Que aquel sentimiento era la fuente de todo conocimiento y que de ahí podría recibir la curación si verdaderamente era solicitada con sinceridad. Entonces fue cuando vi un brillante, palpitante y radiante "amanecer" dorado. Pedí ayuda a aquel amanecer. Tuve que concentrarme bastante. Cuando aquellas radiaciones se aproximaron hacia donde yo estaba, disminuí mi concentración, y entonces ellas retrocedieron. Entendiendo lo que estaba sucediendo, me concentré lo máximo que pude. Seguidamente, las radiaciones doradas, me alcanzaron y comenzaron a "jugar" en mis pies y luego firmemente alzaron mi cuerpo, y mientras lo hacían, un sentimiento de bienestar fluía por todo mi cuerpo. Seguidamente, aquellas radiaciones rápidamente se situaron detrás de mí. Estaba completamente curada. Finalmente, en voz alta agradecí encarecidamente a aquellas radiaciones lo que habían hecho por mí.

El doctor me pregunto qué es lo que me había sucedido. Le dije que no lo sabía, y comencé a contarle mi experiencia. Él me dijo que ya había escuchado de sus pacientes y en numerosas ocasiones historias como la mía. Cuando le pregunte qué es lo que significaba él me respondió que ojala podría explicármelo pero que no lo sabía. Sin embargo, su aprobación ante mi experiencia, fue valiosísima para mí. Afortunadamente, no se tomó a burla mi experiencia.

¿La experiencia fue difícil de expresar con palabras? No

¿En el momento de tu experiencia hubo algún evento asociado que amenazara tu vida? Sí Pérdida de consciencia espontáneamente.

¿En qué momento durante la experiencia tuvo su mayor nivel de estados de consciencia y alerta? Más consciente y alerta de lo normal. Cuando mire y vi el brillante, palpitante y radiante “amanecer” dorado.

Por favor compare su sentido de la visión durante la experiencia con el sentido de visión cotidiano que tenía inmediatamente antes de la experiencia. Sí. Toda mi vida he tenido una visión no muy buena, pero no fue el caso durante aquella experiencia. Podía ver a lo lejos y con mucha claridad cada diminuto detalle.

Por favor compare su sentido de audición durante la experiencia con el sentido de audición cotidiano que tenía inmediatamente antes de la experiencia. No. Mi audición era perfecta, ya que podía percibir cualquier tipo de sonido sin importar lo lejos que éste estuviera.

¿Has vivido una separación de tu consciencia y de tu cuerpo? Sí.

¿Qué emociones sentiste durante la experiencia? Mucha calma. Ningún miedo. Total confianza. Un conocimiento interior que me decía que todo estaba y estaría bien.

¿Has pasado en o a través de un túnel o espacio cerrado? Sí. Al principio yo estaba en un camino que el suelo y las paredes eran de terciopelo marrón suaves. Yo las toque, simplemente supe que eran suaves. Mi caminar no emitía sonido alguno.

¿Has visto una luz? Sí. Una luz brillante, palpitante y radiante. Como el amanecer del sol cuando se encuentra detrás de una colina.

¿Has visto o te has encontrado con otros seres? Sí. Un hombre joven con el pelo rubio, rostro bronceado y con un suéter de esquí lujoso se me acercó. Me recordó a un primo que había fallecido a una edad muy temprana alrededor de los 31 años. A mi izquierda, había una habitación con un grupo de personas, del cual aquel hombre joven apareció. Yo no podía verlos pero creía que. Podía oírlos conversar sobre diversos temas intelectuales. Uno de ellos, de piel bronceada y que se encontraba fuera de la habitación la mayor parte del tiempo, era como mi padre, el cual era deportista

¿Has revisado acontecimientos pasados de tu vida? No. Si alguna vez me encuentro enferma, o cualquier otra persona lo está, cierro mis ojos y visiono el “amanecer dorado” rezándole a él por una sanación.

¿Has visto u oído, durante tu experiencia, algo concerniente a personas o acontecimientos y que pudo ser verificado después? No.

¿Has visto o visitado lugares, niveles o dimensiones admirables o particulares? No.

¿Tuviste el sentimiento de una modificación del espacio o del tiempo? Sí. Me emocionó pensar en ello.

¿Tuviste el sentimiento de tener acceso a un conocimiento particular, a un objetivo y/o a un orden del universo? Sí. Sé que éste no es el único reino o realidad.

¿Has alcanzado un límite o una estructura física de delimitación? No. No pude ir más allá de la colina y viajar directamente hacia aquel “amanecer dorado”. Estaba prohibido.

¿Has tenido consciencia de acontecimientos por venir? Incierto. Tengo ESP (Percepción Extra Sensorial) y ya he experimentado varios sucesos de naturaleza espiritual.

Después de tu experiencia ¿has tenido dones especiales, paranormales, de videncia u otro, que no tenías antes de la experiencia? Sí. Localización de enfermedades. Experiencias espirituales. Conocimiento del futuro.

¿Has compartido esta experiencia con otras personas? No. Solo a mi médico y bajo una discreción médica. No se lo he contado a ninguna otra persona

¿Tenía usted algún conocimiento de experiencias cercanas a la muerte (ECM) previamente a su experiencia? No.

¿Qué pensó usted de la realidad de su experiencia poco después (días a semanas) después de que sucedió? La experiencia fue definitivamente real. La vi como una experiencia espiritual la cual fue totalmente real desde aquel día hasta hoy.

¿Qué piensa actualmente usted de la realidad de su experiencia? La experiencia fue definitivamente real. Sé que fue real, y desde que he la he tenido confirma aún más mi creencia.

¿Hay alguna o varias partes de su experiencia que sean especialmente significativas para usted? Aquel “amanecer dorado” es la fuente. Acudir allí para tus necesidades.

¿Sus relaciones han cambiado específicamente como resultado de su experiencia? No.

¿Ha cambiado la práctica de sus creencias religiosas/espirituales como resultado de su experiencia? Sí. Sí. Soy mucho más espiritual. No pertenezco a ninguna denominación porque ahora me doy cuenta de que eso no es importante. Creo firmemente en Dios y en la oración.

En cualquier momento de su vida, ¿Hay algo que alguna vez lo haya hecho reproducir alguna parte de su experiencia? No.

¿Hay algo más sobre su experiencia que le gustaría agregar? Ojala todas las personas pudieran experimentar este tipo de evento. Este mundo sería mejor.

¿Las preguntas realizadas y la información provista por usted describen precisa y exhaustivamente su experiencia? Sí. Sus preguntas fueron comprensibles.