ECM de Rachel
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Descripción de la experiencia:

En el hospital yo estaba en el equipo de 3 h a 11 h y les hacía radiografías a los pacientes en el servicio (mi trabajo habitual en tanto que vigilante). Padecía atroces dolores abdominales. Sabía que algo terrible pasaba en mi cuerpo porque durante unos 6 meses el dolor no paraba de ir y venir. Esa tarde, aquello se volvió casi insoportable. Se dice que las enfermeras son las peores pacientes: me gustaría ver a cualquier otro con mis mismas obligaciones, seguir aplazando las cosas. Además, me automedicaba con medicamentos comprados sin receta (algunos años antes se me había diagnosticado una colitis). Esta vez sentía que era diferente. Aquella semana me cité con el médico, pero no pude ir pues al día siguiente por la mañana acabé en las urgencias del hospital, plegada en dos de dolor. No pude ir más lejos. Primero se intentaron exámenes que no revelaron lo que se buscaba. Luego, se hizo necesaria sin demora la cirugía exploratoria. Antes de ser anestesiada, durante la preparación, y llegando a la sala, me di cuenta: “Oh Dios mío, me voy a morir”. ¡Soy enfermera, aquello forma parte de mi oficio! ¿No? Aquel pensamiento no casaba con mi formación. De hecho, ¡en ningún momento perdí el conocimiento! Quiero decir que mi cuerpo sucumbió a la anestesia, pero yo estuve en todo momento completamente consciente, muy ajena sin embargo a lo que se hacía ahí abajo sobre mí (mi cuerpo). Empecé a subir. Eso de subir parecía muy natural entonces. Yo estaba en un túnel y tenía la impresión que las cosas planeaban pasando cerca de mí. ¿¿¿Por telepatía??? No sé cómo realmente, pero tomé consciencia de la presencia de 2 entidades masculinas a mis lados, mientras me propulsaba en ese túnel. Eran Seres Angélicos, yo lo sabía, me acompañaban en mi ascensión (en cualquier caso parecíamos subir, no sé). Luego, de golpe, vi a mi abuela paterna, radiante y luminosa, la luz dirigida hacia mí, su cara entusiasmada, las manos tendidas en mi dirección. Ella sonreía. ¿¿¿Ella estaba en una especie de bruma o de nube??? Sus manos intentaban coger las mías para abrazarme. No sé cómo, sentí la presencia de otras personas acompañándola, como una especie de comité de acogida. Tendí las manos para coger las suyas. En cierta manera, yo estaba tan sorprendida… Dije: “Abuela, ¿qué haces tú aquí?” (ella estaba muerta desde hacía muchos años). Alguien, uno de los seres angélicos, dijo: “¡NO Rachel!”. Supe, por una especie de telepatía, que si tocaba su mano no podría volver. Es como si hubiese sido detenida por un muro invisible levantado de golpe. Pregunté: “¿¿¿Por qué no???”. Ellos respondieron: “¡NO!” de manera insistente y muy seria, pero con amor. “¡No! Debes volver”. Pregunté: “¿Por qué?” Yo quería ir a ese bello lugar, pero fui detenida. Luego oí la voz de mi hija pequeña de 3 años decir: “No digas adiós mami, mami no te vayas”. Ella vivía en casa de mi hija; ésta me confirmó más tarde (sin que yo mencionase nada de nada) que Sammy tenía grandes capacidades mediúm nicas; estaba en su pequeño cuarto jugando con sus juguetes en el momento en que partí. Dijo, sola, en voz alta, lo que acabo de mencionar: mi hija lo oyó. Yo fui proyectada a mi cuerpo y me desperté en reanimación con tubos en todos los orificios. Me contaron más tarde que los cirujanos salieron y les dijeron a mis hermanos y hermanas que lo único que podían hacer era rezar.

Fundamentalmente, aquello era más grave de lo que ellos creían y yo estaba muy débil. Las perspectivas no eran buenas. Habían extirpado un tumor canceroso del tamaño de un pomelo, y habían amputado gran parte de mis intestinos y practicado una colostomía. Me daban 3 meses de vida: eso es lo que mi familia me dijo más tarde. Bien, ahora estoy cansada de escribir, pero también abandoné mi cuerpo 3 ó 4 veces después de eso; seres angélicos me informaron que no tenía cáncer y me permitieron observar mis células en mi propio cuerpo, y hay más. Volví a mi casa; evidentemente aún no había aterrizado completamente, no estaba totalmente en mi cuerpo. Parece que la unión con mi envoltura física estaba muy relajada. Aprendí mucho; y todavía puedo subir meditando. Me gusta eso.

En 1992, mi hijo menor murió en un accidente de coche volviendo de la universidad: pues también le vi a lo largo de estos últimos años. Si puedo ayudaros, soy voluntaria. Sé que las ciencias empíricas intentan atribuir estos relatos a neurotransmisores en el cerebro orgánico, etc... A menudo me he planteado la cuestión en tanto que estudiante de una carrera científica, pero sé que es falso (puesto que, sin ningún género de duda, existe una dimensión diferente, que aquí llamamos paraíso; yo he ido allí. Si puedo ayudaros de alguna manera, gracias por hacérmelo saber.). T.Y. Rachel.

1. ¿Medicamentos o sustancias asociados habiendo podido potencialmente afectar la experiencia? No.

2. Explicación: Dicen que el anestésico sume al paciente en una nada parecida al sueño. Sin embargo, yo dejé la sala de operaciones y estaba completamente lúcida.

3. ¿La experiencia fue difícil de expresar con palabras? No estoy segura.

4. ¿Qué es lo que en la experiencia la vuelve difícil de transmitir? Muchas informaciones vertiéndose simultáneamente por los sentidos.

5. En el momento de la experiencia ¿existía ahí una situación amenazando su vida? Sí.

6. Describa: Cirugía de urgencia con un diagnóstico poco alentador.

7. ¿Cuál era su estado de consciencia y de lucidez en el momento de la experiencia? Muy consciente.

8. ¿De alguna manera, la experiencia se parecía a un sueño? En cierto modo; pero en realidad no.

9. ¿Vivió una separación de su consciencia y de su cuerpo? Sí.

10. Describa su apariencia o forma fuera de su cuerpo: Era más o menos como soy yo misma, pero ligera.

11. ¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Me parecía muy normal no tener ningún otro sitio al que ir salvo aquél en el que me encontraba; sin embargo no era así.

12. ¿Oyó sonidos o ruidos anormales? Una especie de ¿¿¿zumbido o murmullo??? En mi cabeza.

13. ¿Pasó en o a través de un espacio cerrado? Sí.

14. Describa: Parecía haber ahí una especie de ¿¿¿muros??? No sé cómo describirlo, la sensación era parecida a un embudo, pero hecho de ¿¿¿como la textura del universo??? como un portal o un agujero de gusanos (pasaje espacio-temporal).

15. ¿Vio una luz? Sí.

16. Describa: Yo subía con 2 ángeles y nos acercábamos a mi abuela muerta, la luz brillaba cada vez más.

17. ¿Se encontró con o vio a otros seres? Sí.

18. Describa: Sí, ya os lo he dicho. No sé cómo, pero me parecía conocer también a esos dos seres angélicos y no solamente a mi abuela.

19. ¿Revisó eventos pasados de su vida? No estoy segura.

20. ¿Observó u oyó, durante su experiencia, cualquier cosa, concerniente a personas o eventos, y que pudo ser verificada después? Sí.

21. ¿Vio o visitó lugares, niveles o dimensiones admirables o particulares? Sí.

22. ¿Vivió una modificación del espacio o del tiempo? Sí.

23. ¿Tuvo el sentimiento de tener acceso a un conocimiento particular, a un objetivo y/o a un orden del universo? Sí.

24. ¿Alcanzó un límite o una estructura física de delimitación? Sí.

25. ¿Tuvo consciencia de eventos futuros? Sí.

26. ¿Estuvo implicada en, o consciente de una decisión de retorno al cuerpo? Sí.

27. Tras su experiencia, ¿tuvo dones especiales, paranormales, de videncia u otro, que no tuviera antes de la experiencia? Sí.

28. Describa: Vi claramente a mi hijo y a Jesús en el otro plano.

29. Tras su experiencia, ¿su actitud y sus creencias han cambiado? Sí.

30. Describa: Verdaderamente existe un DIOS VIVO, poco importa aquello a que se le llame Dios.

31. La experiencia ¿ha afectado sus relaciones, su vida cotidiana, sus prácticas religiosas o similares, sus elecciones de carrera? Soy más consciente de lo que representa la aventura de encontrarse en un cuerpo y también que la vida es muy corta.

32. ¿Ha compartido esta experiencia con otras personas? Sí.

33. Describa: Solamente con algunas personas muy próximas.

34. ¿Qué emociones sintió tras su experiencia? Respeto y amor englobando muchas cosas ordinarias (por ejemplo un árbol o un vaso de leche, etc.).

35. ¿Lo mejor y lo peor de su experiencia? Ir y venir entre los reinos. También sentí mucho amor y compasión por el prójimo, eso se acentuó. A veces me siento muy melancólica por tener que estar aquí en esta pesada máquina que llaman cuerpo.

36. ¿Hay otra cosa que desearía añadir con respecto a la experiencia? Tuve otros encuentros con seres espirituales antes de mejorar. El oncólogo me dijo que necesitaba una quimioterapia y lo que se debía hacer. El ser de luz me dijo lo que iba a ocurrir en mi propio esquema de vida.

37. ¿Su vida ha cambiado específicamente a resultas de su experiencia? Sí.

38. Describa: Estoy muy interesada por las otras dimensiones.

39. Tras la experiencia, ¿otros elementos en su vida, medicamentos o substancias han reproducido parte de la experiencia? Sí.

40. Describa: Sesiones de meditación y rezos (a menudo he hecho salidas del cuerpo).

41. Las cuestiones planteadas y las informaciones que acaba de suministrar ¿describen completamente y con exactitud su experiencia? Sí.

Querido Dr. Jeff, sí puedes publicar mi ECM en su totalidad tal como mencioné, puedes indicar mi dirección de correo electrónico y mi nombre si así lo deseas. Me llamo Rachel. Creo que se trata de investigaciones muy importantes por los profundos efectos sobre las personas que han vivido una ECM.

Eso deja a la persona perpleja como en un fenómeno de abducción por OVNI. Pocas personas están interesadas o creen en ello, sin embargo permanecen corteses, al menos para desapasionar el debate. Nuestra sociedad evita particularmente la experiencia de la muerte incluso cuando se ha consumado. Siendo enfermera, encuentro esto muy triste pues la muerte es la última gran aventura que corremos en este planeta y la mayoría de la gente (incluidos los profesionales) se sienten muy incómodos al comunicar con las víctimas o pacientes en fase terminal. Esto puede ser muy desmoralizador para el paciente. Son necesarias más investigaciones, eso va más allá de alucinaciones provocadas por la anoxia de las células cerebrales a la manera de un ordenador que se apaga. Nosotros somos más que nuestro cuerpo físico y por supuesto, personas de todas las culturas de tiempos pasados han hablado de su ECM. Científicamente hablando, parece que eso sea el punto Omega (física cuántica) que se funde con la fuente. T.Y. Rachel.