Descripción de la experiencia:

Me estaban practicando una biopsia de mama debido a la presencia de bultos. Tenía diez y ocho años y estaba embarazada de mi primer hijo. Usaban anestesia local así que me hallaba totalmente consciente de todo cuanto sucedía a mi alrededor. Iba a ser una cirugía simple, sin internación, lo que significaba que me iría a casa apenas terminara.

Sentía al doctor cuando me cortaba y sacaba los bultos como si la anestesia no hubiera estado haciendo efecto como debía. El doctor sabía la sensación desagradable que tenía porque me preguntó si lo sentía trabajar en mí. Le respondí que sí. Supongo que no me creyó porque no hizo nada al respecto.

Lo que sucedió a continuación fue que mi cabeza empezó a girar como un trompo y me sobrevino una sensación de calor muy grande en todo el cuerpo incluyendo los pies.

Las experiencias de mi vida se proyectaron frente mis ojos como si hubiese estado mirando una película a velocidad aumentada hacia delante. Fue en ese momento cuando sentí que mi cuerpo se separaba del que se hallaba sobre la mesa de operaciones y comencé a flotar. En todo momento escuché a los doctores y enfermeras hablar. Escuché al doctor decir: “Vamos tíos, la estamos perdiendo, la estamos perdiendo”. Luego todo se cortó y ya no pude entender nada de lo que decían. Sólo podía ver a los doctores y a las enfermeras trabajando frenéticamente en mí.

De inmediato una sensación de miedo se apoderó de mí al flotar hacia arriba en dirección a un inmenso largo túnel que se parecía a un sombrero de fiesta de lado. La abertura por la que entré era grande pero al final del túnel la salida se hacía más pequeña y había una luz brillante brillante, casi enceguecedora.

Una chica emergió al final del túnel. Estaba esperándome. Llevaba puesto un vestido/robe , podía tratarse de uno u otro. La robe era tan brillante como la luz al final del túnel y su piel no tenía color. Ella misma se veía como una luz pero tenía un rostro y manos. Su robe le cubría los pies y las piernas así que ni siquiera recuerdo que los tuviese.

Ella sabía que tenía miedo, por ello me extendió la mano y me consoló. Me hizo saber que estaría bien. Una sensación de calma me invadió instantáneamente. Una calma que nunca había experimentado antes. Era muy pacífico.

Continué dándome vuelta para mirar hacia abajo a la sala de cirugía pero ella me dijo que no me preocupara por lo que había atrás y que avanzara porque había muchas mejores cosas reservadas para mí donde ella me llevaba. Acordé y seguí avanzando rumbo al final del túnel. No percibí ningún sonido en absoluto. No se pronunciaron palabras. Podía leer sus pensamientos y ella los míos de tal suerte que no necesitábamos de las voces para comunicarnos. Le decía mi nombre pero ella me dijo que no necesitaba un nombre donde iba, lo que en cierto modo me dejó perpleja pero confié en ella porque era muy amable. Conforme nos acercábamos más y más al final del túnel pude sentir el calor de la luz. Nos miramos la una a la otra y sonreímos y luego dos tíos vestidos de la misma forma que ella se nos acercaron, nos dieron la bienvenida y me saludaron. ¡Todos me hicieron sentir tan como en casa y quería tanto irme con ellos!

De repente, uno de los tíos que había venido a saludarme me miró y me dijo que era necesario que regresara porque mi hora de estar con ellos todavía no había llegado. Me vino una sensación de tristeza porque no quería regresar. Luego sentí confusión e indecisión. Me enfrenté a la decisión de volver o permanecer con ellos. Sabía en lo profundo de mí corazón que no quería volver porque no sentía la necesidad de hacerlo. No necesitaba a nadie ni a nada allá atrás. El me aseguró que todos estarían allí para darme la bienvenida cuando fuera mi hora de regresar. Me dejó muy en claro que estaba bien que me fuera con ellos pero que no creía que fuera una buena decisión de mi parte. También dejó bien bien en claro que una vez que flotara fuera del túnel no podría regresar y me quedaría con ellos para siempre, lo que me pareció perfecto.

La chica que vino a darme la bienvenida no deseaba que me fuese pero él la miró como diciendo recobra el juicio y haz más fácil para ella (que era yo), la decisión. Realmente no podía escuchar sus pensamientos pero podía ver la expresión de su rostro. Mientras todos sonreían nuevamente, mi cuerpo flotó hacia atrás hasta que los perdí de vista. No me encontraba ya en el túnel y sentí como si una succión me hubiese tirado hacia atrás dentro de mi cuerpo que yacía sobre la mesa de operaciones.

Desperté y oí al doctor llamarme por mi nombre.

Tenía que contarle a alguien esta historia porque cuando más tarde aquél día se la refería mi mamá me dijo que todo era una invención de mi imaginación, que debía olvidarlo y no decírselo a nadie. Me dijo que sólo estaba imaginando cosas y que nada era verdadero pero era difícil para mi ocultarlo porque sabía que lo que había vivido era tan real como que ella y yo estábamos hablando en aquél preciso momento. Todavía puedo verlo como si hubiera sucedido ayer.

NDERF pregunta: ¿Tuvo alguna sensación de familiaridad cuando se encontró con los otros seres?

Cuando tuvo su primer bebé, ¿era una niña?

Chae responde: Sí, tuve una sensación de familiaridad cuando aparecieron los otros dos seres. Sentí que ya los conocía.

Sí, tuve una niña y me sentí compelida a llamarla KEARA. Es un nombre ruso que se pronuncia QUI- A- RA. Fue como si este nombre me hubiera sido comunicado porque no sé nada de Rusia ni del pueblo ruso.

También experimenté cierto, no sé si quiero llamarlo (don) psíquico porque no me considero una psíquica pero he visto cosas que me han sido reveladas antes de que sucedieran y he tenido Deja Vu una y otra vez. Lugares y eventos que simplemente eran demasiado familiares. También me han sido revelados caminos que debía tomar en la vida. Siempre descartaba estas cosas hasta hace poco debido a las creencias de mi madre. Lo increíble de todo esto es que no se siente extraño ni me hace sentir incómoda. Todo se siente normal cuando tengo las visiones. ¿Sabe qué significa todo esto? ¿Por qué me ocurrió?

¡Muchas gracias por su tiempo!