Descripción de la experiencia:

El examen de mielografía de Noviembre de 1987 estaba siendo llevado a cabo en el Hospital St. Francis de Santa Bárbara, en California y mi Neurocirujano y mi Cirujano Ortopédico se encontraban presentes. Estaba agendada para que me hicieran una disquectomía / laminectomía la mañana siguiente en mi disco L5-S1 que había reventado, pero debido a que había perdido el setenta por ciento de fuerza en mi pierna izquierda después de reventar el disco, habían decidido hacer una mielografía para verificar si tenía algún daño de la médula espinal antes de operarme. También presente en la sala estaba un Tecnólogo Médico a cargo de los rayos X y a lo menos dos otras personas, seguramente personal de apoyo.

Mientras descansaba sobre la mesa de rayos X, se me inyectaba medio de contraste yodado en mi médula espinal en un punto ubicado en la parte posterior de mi cuello. Se me había pedido quedarme muy quetecita. El Tecnólogo había iniciado el movimiento de la mesa mientras conversaba con alguien afuera de mi campo de visión. Se me había dicho que la mesa sería puesta en posición que llevara mi cabeza a estar más alta, permitiendo que la gravedad llevara el medio de contraste hacia abajo en mi médula espinal. Entonces serían tomadas algunas imágenes de rayos X para determinar si la médula ósea estaba dañada antes de llevar a cabo la cirugía, al día siguiente.

Sobre la mesa de rayos X, yo empecé de inmediato a sentirme rara y fuera de control. Sentí como si fuese a perder la conciencia y comprendí que no podría moverme ni comunicarme y luché para estar alerta y presente en la sala. Quería avisarle al Tecnólogo, mas no podía. Comencé a respirar rápido y él abandonó la conversación para mirarme. Mis ojos se iban hacia atrás en mi cabeza y yo luchaba por mirarlo a él y no quedar inconsciente. Lo vi sorprenderse, reclinarse hacia atrás para comprobar la posición de su dedo en los botones de control y luego mirar conmocionado. Yo quedé inconsciente.

Me pareció que simplemente hubiese cerrado mis ojos y al abrirlos de nuevo, mi punto de visión había cambiado. Yo veía ahora la habitación desde arriba de la mesa de rayos X y de hecho sentía que mi nuca estaba presionando contra el techo. Podía ver y oír todo en la habitación y abajo se desarrollaba un pandemonio. Algunas de las personas presentes se aglomeraron en torno a la mesa de rayos X, alguien estaba hablando por teléfono pidiendo ayuda y la habitación se volvió muy ruidosa y una sensación de pánico emanó desde los presentes. Mi muerte fue una situación para la que la Sala de Rayos X estaba muy mal preparada.

Arriba en el techo, yo me sentía absolutamente en calma y despreocupada y el pensamiento que de inmediato tuve fue: 'Estoy muerta. Si yo estoy acá arriba y mi cuerpo allí abajo, es porque he muerto'. No había angustia, miedo ni rabia; tan sólo la constatación de la situación mientras yo observaba a la gente abajo trabajando con mi cuerpo. De hecho, me sentía despreocupada acerca de mi propia muerte.

Yo calmadamente comencé a hablar con Dios, como habitualmente hago y yo simplemente le dije que quería volver. Le dije que quería volver a criar a mi hijita de tres meses y a mi hijo de ocho y medio años. Yo supe que pronto abandonaría a mi esposo ya que me encontraba en un matrimonio físicamente muy violento y que los niños debían estar a mi cuidado. Le pedí regresar a mi cuerpo para ser el respaldo de mis niños. Yo deseaba intensamente poder regresar a mi cuerpo y calmadamente le pedí que me regresara.

En la habitación, debajo de mí, un carro de oxígeno fue rápidamente llevado a la pieza y una máscara de oxígeno puesta en mi cara. También fue traído un monitor cardíaco y fue conectado a mi cuerpo. Recuerdo mirar desde el techo la pequeña pantalla mostrando una línea plana mientras emitía un largo zumbido en un sólo tono. No sé cuánto tiempo pasó mientras hablaba con Dios, mirando el desarrollo de la escena allí debajo.

Oí al Cirujano Ortopédico decir: ‘¡Aléjense!' y dejó caer su puño en un amplio arco que golpeó sobre mi pecho. Lo volvió a levantar sobre su cabeza y lo hizo aterrizar de nuevo en mi pecho. No me dolía. Yo observaba pasivamente desde arriba, pero el segundo golpe hizo que mi visión desde arriba se volviera oscura, como si mis ojos se hubieran de nuevo cerrado.

Abrí mis ojos de un golpe otra vez y quedé sorprendida de estar mirando sus rostros desde abajo y era obviamente la visión desde mi propio cuerpo. Tenía puesta la máscara de oxígeno ¡Y entonces podía oír el bip, bip del monitor que registraba mi corazón latiendo! ¡De inmediato quise decirles que los había estado viendo desde el techo! Comencé a hablarles desde mi máscara de oxígeno. Me aconsejaban no hablar, diciendo que necesitaban estabilizarme. Me resultaba demasiado difícil esperar para decirles lo que había vivido. ¡Me sentía contenta y entusiasmada! ¡Sentía una inmensa alegría por haber retornado!

Cuando me sacaron la máscara de oxígeno, le relaté a los dos Doctores y a todos los demás presentes que yo '¡Había estado en el techo – y los había estado observando mientras me traían de vuelta!' Continué diciéndoles que podía ver y oír todo cuanto acontecía allá abajo. El Neurocirujano es bien conocido por su sorprendente experiencia quirúrgica y también por una actitud más bien brusca de rechazo a lo insensato. Él parecía de inmediato escéptico, así es que comencé a relatarle los detalles de lo que pasaba mientras me encontraba en el techo, diciéndole: '...¡Y Ud. dijo..., y él dijo... y entonces...!' Ambos doctores lucían desconcertados y entonces el Neurocirujano dijo: '¡Yo no voy a quedarme aquí a escuchar todo esto!' y abruptamente salió de la pieza. El Cirujano Ortopedista sostuvo mi mano y lo recuerdo consolándome, pero nadie me permitió seguir hablando sobre lo que había ocurrido.

Cuando fui llevada a mi habitación, nadie del equipo de apoyo respondería a mis preguntas durante mis cuatro días de hospitalización siguientes, tras mi exitosa cirugía de espalda. Mi esposo se rió de mi historia, diciendo que no podía haber pasado dado que nadie en el hospital admitiría algo así. Incluso en mis controles de seguimiento, ni el Doctor discutió nada sobre lo ocurrido en la Sala de Rayos X, ya que seguramente temían alguna repercusión legal. Al presionárseles para explicar todo esto, el Neurocirujano minimizó la situación diciendo que yo había presentado una reacción alérgica al yodo usado en la mielografía. Yo sabía que había sucedido por error humano, pero ya que yo no pretendía proseguir ninguna acción legal ni podría conseguir que nadie respaldara los hechos de mi ECM, por fin decidí no hablar con nadie acerca de mi experiencia.

Jamás olvidé mi ECM. Yo atesoré la experiencia y me sentí feliz que yo hubiera llegado a experimentar este hecho, mas no hablé de esto con nadie hasta cerca de diez años después. Me di cuenta que contar mi historia ayudaba a alguien cuya madre estaba muriendo y le conté mi historia a esa Enfermera cristiana, amiga mía. La fui consolando mientras discutíamos sobre mi ECM ella me confirmó que algunos Médicos usan un golpe de puño pre-cordial como un último esfuerzo para salvar la vida al no tener acceso a una unidad desfibriladora ya que el golpe puede remover al corazón y permitir que siga latiendo. Yo recordé que había visto a mi Cirujano Ortopédico levantar su puño en arco para reactivar mi corazón y esto confirmó que mi ECM había realmente pasado.

Yo siempre he tenido una fuerte conexión con Dios, incluso cuando yo era una niñita, y esta ECM definitivamente la reforzó más. Yo no tengo miedo de morir y ahora espero salir de esta vida hacia lo que sea que haya más allá. Sentí la calma, la paz y la dicha de lo que hay después de la muerte. Creo que me ha sido dado un regalo de Dios, la oportunidad de regresar a mi cuerpo y de continuar viviendo mi vida para criar a mis niños, para enderezar las muchas retorceduras de la senda de mi vida, lo que felizmente, he logrado hacer con éxito sobre los últimos veinte años.

Pienso que estoy aquí por muchas razones, algunas que realmente comprendo y otras que me serán enseñadas por Dios cuando el momento sea adecuado. Me esfuerzo en ser una presencia positiva en la Tierra y en las vidas de mi familia y de mis amigos, así como en mi comunidad y en el mundo. Me siento agradecida de que se me haya entregado el regalo de estar aquí. Yo gozo cada día mi vida. He sido reconocida como una esposa positiva, optimista y feliz (dos años y medio después de mi ECM me divorcié y me casé dos años más tarde con mi actual esposo, ¡¡Quien ha sido un verdadero regalo maravilloso!!), madre de cinco hijos (¡Suyos, míos y nuestros!); mujer de negocios y empleadora; voluntaria comunitaria; Rotaria (Lema del Club de Rotarios: El Servicio por Encima del Yo') y más importante: ¡Feliz cristiana! ¡'La Vida es Buena' y estoy feliz de estar aquí hasta mudarme y experimentar por completo la 'vida después de la vida'!

Información previa:

Sexo: Mujer

Fecha en que ocurrió la ECM: Noviembre de 1987

¿En el momento de su experiencia, existía alguna circunstancia que amenazara su vida? Si Relacionado con una cirugía Durante un examen de mielografía con rayos X, antes de una cirugía de columna. El Tecnólogo de rayos se equivocó al apretar el botón equivocado en la máquina de rayos X. Esto hizo que mi cabeza bajara en vez de levantarla. El medio de contraste yodado que acababa de ser inyectado dentro de mi cuello, rápidamente fluyó hacia mi cerebro, produciendo una rápida muerte clínica.

Elementos de la ECM:

¿Cómo considera el contenido de su experiencia? Maravilloso

La experiencia incluía: Experiencia fuera del cuerpo

¿Se sintió separado de su cuerpo? Claramente abandoné mi cuerpo y existí fuera de él

¿Cómo compararía su máximo nivel de consciencia y alerta durante la experiencia con su consciencia y alerta normal de todos los días? Más Consciente y alerta de lo normal Como se menciona más arriba.

¿En qué momento de la experiencia estuvo en su máximo nivel de consciencia y alerta? Después me encontré a mí misma fuera de mi cuerpo. Me sentí muy en calma, maravillosamente y dichosa.

¿Sus pensamientos estaban acelerados? Increíblemente

¿El tiempo pareció acelerarse o ralentizarse? Todo parecía estar sucediendo a la vez; o el tiempo se detuvo o perdió todo significado

¿Sus sentidos eran más intensos que de costumbre? Increíblemente más intensos

Compare por favor su visión durante la experiencia con su visión cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Incierto Posiblemente. Pienso que podría haber sido capaz de fijarme en cosas que habitualmente no soy capaz de ver a distancia. Ejemplo: Veía la habitación desde mi punto de vista aventajado, y aun así recuerdo poder ver claramente la pantalla del monitor cardíaco casi como si mi rostro estuviera a medio metro o un metro de su frontis.

Compare por favor su audición durante la experiencia con su audición cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Si Todo parecía oírse a gran volumen y desagradablemente debajo mío, a pesar de saber que ellos trataban de salvarme la vida.

¿Le pareció ser Consciente de cosas que ocurrían en otro lugar, como si se tratase de percepción extra sensorial (ESP)? Sí, y los hechos han sido comprobados

¿Pasó hacia o a través de un túnel? No

¿Encontró o llegó a ser Consciente de algún ser difunto (o todavía vivo)? No

¿Vio, o se sintió envuelto por, una luz brillante? Una luz de claro origen místico o de otro mundo

¿Vio una luz sobrenatural? No

¿Le pareció entrar a algún otro mundo sobrenatural? No

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Calma, paz, dicha y el deseo de regresar por el bien de mis niños.

¿Tuvo¿Tuvo una sensación de alegría? Felicidad

¿Sintió una sensación de armonía o unidad con el Universo? Me sentía unido o uno con el mundo

¿Le pareció de repente entenderlo todo? Todo sobre el Universo

¿Volvieron a usted escenas de su pasado? Mi pasado rápidamente pasó ante mí, fuera de mi control

¿Vinieron a usted escenas del futuro? Escenas del futuro del mundo Ciertos eventos futuros, sí. Yo he tenido algunas pocas premoniciones que se demostraron verdaderas. Una fue cuando tenía siete meses de embarazo de mi último hijo y 'vi' que tendría un bebé de 4 Kg. 900 gr. Se lo dije a mi Ginecólogo en tres ocasiones distintas y él fue extremadamente displicente y se negó a tomarme en cuenta de manera seria. El 16 de Febrero de 1994, di a luz a un varoncito de 4 Kg. 902 gr. que llegó anticipado en una semana. Debido a su tamaño y a las complicaciones de su nacimiento por la falta de precauciones para recibir un bebé tan grande, casi fallece al nacer. ¡Hoy él está feliz, saludable, 1 metro y 90.6 cm de trece años y en Octavo grado básico y compite en waterpolo y ama crear videos cuadro-a-cuadro! ¡Por cierto que cambiamos de Ginecólogo después de su nacimiento! Otra premonición muy fuerte la tuve en Septiembre de 2001, que involucraba que gran parte de la ciudad de Santa Bárbara sería destruida por una ola gigante producida por un terremoto. No ha ocurrido, pero todavía me siento preocupada por la posibilidad de que ocurra en el futuro. Yo no 'veo' rutinariamente el futuro, así es que responderé que no a la pregunta N° 35.

¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante? Si Yo no abandoné la habitación. Fuertemente deseaba retornar a mi cuerpo y a mi vida.

¿Llegó a una frontera o punto de no retorno? Llegué a una barrera que no se me permitió cruzar; o fui devuelto contra mi voluntad

Dios, espiritualidad y religión:

¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su experiencia? Incierto Cristiana

¿Han cambiado sus prácticas religiosas desde su experiencia? Si Yo sé que Dios existe y que tiene completo control de mi vida. Confío en él por completo.

¿Cuál es su religión ahora? Moderada cristiana

¿Ha tenido un cambio en sus valores y creencias debido a su experiencia? Si Si Yo sé que Dios existe y que tiene completo control de mi vida. Confío en él por completo.

¿Le pareció encontrar a un ser místico o una presencia, u oyó una voz no identificable? Me encontré con un ser definido, o una voz claramente de origen místico o sobrenatural

¿Vio usted espíritus fallecidos o religiosos? Los vi realmente

Con respecto a nuestras vidas terrenales aparte de la religión:

¿Obtuvo durante su experiencia conocimiento o información especial sobre su finalidad? No. Bueno, en un sentido, me di cuenta de que Dios deseaba que me hiciera cargo amorosamente y respaldara a mis niños, ya que le pedí regresar debido a ellos. Sé que esto podría sonar increíblemente extraño, pero esta historia es absolutamente cierta. La he relatado frente a cientos de personas de negocios en mi comunidad y prácticamente a diario cuando alguien me pregunta por qué abrí mi negocio en Marzo de 2003. Yo viví lo que sólo puedo definir como una increíble epifanía que aconteció en mi sala de estar alrededor de las 6:30 de la mañana durante un día normal de trabajo, después de haber despertado a mis niños para ir a la Escuela. Oí lo que yo creo fue la voz de Dios y sentí mi cabeza como si hubiese sido fuertemente sostenida y tuve una sensación extraña, como miel que se deslizara sobre mi cuello y mis hombros. Oí con claridad una voz y pienso que Dios me habló a mí y me pidió crear una tienda de menudeo al por menor (de álbumes de recuerdos personalizados [scrapbooking] y artes en papel), cuando yo no sabía nada de álbumes de recuerdo ni de tiendas de menudeo al por menor y me encontraba muy felizmente trabajando como Secretaria en una Universidad local. Seis horas luego de la epifanía, escuché una voz diferente mientras conducía mi auto hacia el hogar y se me pidió detenerme y preguntar sobre préstamos para negocios en mi banco. Me encontraba a dos cuadras y me detuve ahí y obtuve un préstamo por $250,000 a los quince minutos de haber entrado en mi banco. Luego encontré un lugar, hice el negocio y abrí el local sólo tres meses después. Fui nombrada una 'Mujer de Negocios del Año' por Emprendimientos Económicos de La Mujer de Santa Bárbara en California, en Octubre de 2004 y con frecuencia hablo sobre esta sorprendente experiencia de epifanía frente a grupos del sector.

¿Han cambiado sus relaciones específicamente debido a su experiencia? Si Encontré la forma de escapar junto a mis hijos de un matrimonio abusivo. Pasé dos años elaborando una lista de atributos que deseaba encontrar en una pareja adecuada y entonces fui presentada a la persona que maravillosamente cumplía mi lista de atributos. Me casé con él y todavía lo adoro después de quince años de matrimonio. Respaldé, guié, y amé a mis hijos e hijastros a lo largo de su infancia, sus años de adolescencia y dentro de su adultez. Constantemente fui voluntaria en mi comunidad y obtuve fondos sin fines de lucro (Yo organicé por mi cuenta un evento que recaudó $4,000 que se dividió entre el Centro del Cáncer de Santa Bárbara y la Fundación de Susan G. Komen para el Cáncer de Mamas de Dallas, Texas. Soy más o menos conocida por mi extrovertida y cálida naturaleza y por ser buena con otras personas. No soy perfecta y sin dudas tengo defectos, pero sí me siento bendecida por estar viva y viviendo mi vida feliz. 'La vida es Buena' y ¡Estoy feliz de seguir y experimentar por completo la vida después de la vida!

Después de la ECM:

¿Fue la experiencia difícil de expresar con palabras? No

¿Ha tenido tras la experiencia dones psíquicos, no ordinarios u otros dones especiales que no tuviera antes de la experiencia? Si Ya he mencionado una de ellas más arriba (saber sobre el extremo peso de mi hijo por nacer) y de hecho, podría darles algunas otras también, pero no me molestaría ser contactada directamente para conversar sobre ellas en vez de que yo las escriba. Una historia involucra salvarle la vida a mi hija y fue una más bien pulcra experiencia física. Algo interesante sobre mí es que yo siempre gano cosas en rifas, dibujos, etc., tanto que mis amigos y mi familia piensan que es bastante raro lo mucho que gano, ¡Pero se alegran de que gane!

¿Hay una o más partes de la experiencia que son especialmente significativas o importantes para usted? Yo sentí que estaba hablando directamente con Dios cuanto le pedí regresar a mi cuerpo. No fue que yo lo hubiera visto, pero lo sentí a Él y fuertemente supe que Él iba a escucharme. Hoy siempre siento que Él puede escucharme cuando hablo con Él. Me doy cuenta que no hay barreras entre nosotros.

¿Ha compartido usted alguna vez esta experiencia con otros? Si Tras la ECM, nadie iba a hablar de eso conmigo, así que yo simplemente lo atesoré y no discutí más sobre esto durante aproximadamente diez años. Desde que empecé a hablar sobre ello, he tenido la oportunidad de decírselo a las personas que están enfrentando la muerte o que han tenido alguien cercano a ellos enfrentando a la muerte. Siento que ayuda a la gente a comprender que las experiencias que nos pasan después de la muerte son algo añorable y que no se necesita sentir miedo por la muerte.

¿Tenía usted algún conocimiento de las experiencias cercanas a la muerte (ECM) antes de la experiencia? Si Sabía de personas que decían que había ocurrido, pero no tenía ningún interés en ellas o por investigar sobre eso. No conocí a nadie a quien le hubiera pasado y dado que yo no veo TV (desde alrededor de 1976), realmente no sabía mucho del tema.

¿Qué pensó sobre la realidad de su experiencia poco tiempo después (días o semanas) de que sucediera? La experiencia fue definitivamente real

¿Qué piensa ahora sobre la realidad de su experiencia? La experiencia fue definitivamente real

¿En cualquier momento de su vida, ha habido alguna vez algo que le haya reproducido parte de la experiencia? No Deseo establecer que yo nunca he probado la marihuana ni otra droga a través de mi adolescencia y mi segunda década (mi mamá era una Oficial de Policía) y que no bebo alcohol en ninguna cantidad (he tomado tal vez unos dos o tres combinados al año desde que tuve veintiuno). Jamás he sufrido ningún tipo de alucinaciones y soy una persona muy sana.

¿Hay algo más que le gustaría añadir acerca de su experiencia? ¡Me gustaría que todo el mundo pudiera tener una ECM como la mía! ¡El mundo sería tan radicalmente distinto si fuera así!